Amistad
“Amigos son los que en la prosperidad acuden al ser llamados, y en la adversidad acuden sin ser llamados.” (Demetrio)

AMISTAD (DISTINTOS AUTORES)
(Benito Spoletini, ssp)

Es tanto lo que se ha escrito del amigo que es difícil encontrar vetas y pistas no rastreadas y, en cambio, es muy fácil ceder a los lugares comunes. Por eso, me limito a algunas "perlas" de conocidos personajes sobre la amistad, leyéndolas desde la óptica de la confianza. Porque puede haber amistad con gente de diverso estatus social, con gente de cultura, de raza, de religión, de intereses diferentes del nuestro, pero de ninguna manera puede haberla sin la confianza.
El hilo sutil y frágil de la confianza
La confianza es "esperar con firmeza y seguridad" y se manifiesta en la fidelidad; es decir, tiende a persistir, a ser duradera e, incluso, para siempre. Es la misma fe henchida de ternura, de seguridad, de entrega; la misma que el niño experimenta en los brazos de su padre donde está seguro que no caerá porque el padre lo mantiene bien asido. Así es la confianza en la amistad. El que es nuestro amigo nos comprende en las buenas y en las malas, e, incluso cuando exageramos, sabe discernir lo justo y perdonar lo malo y seguir queriéndonos, correspondiendo a nuestra confianza. Una de las más frecuentes causas de la ruptura de una amistad se da cuando se genera la desconfianza entre amigos. Frecuentemente, en mi vida profesional, he atendido a gente en esa situación: "Creía que tal persona era mi mejor amigo y no tolero su traición". Incluso cuando aparentemente se dan otras razones, más a fondo se descubre que lo que ha fallado es ese hilo sutil y frágil de la confianza: un hilo tan sutil y tan frágil, que es fácil de quebrarse y casi imposible de recomponerse. De allí concluimos que la confianza es el eje central sobre el cual rueda la amistad.
Tres perlas de "famosos" para el día del amigo
La primera es de Antoine de Saint-Exupery, autor de "El Principito". Y, aunque no la nombra, apunta decididamente a la confianza, pues, ¿a quién abrimos la puerta de nuestra casa? ¿A quién abrimos la puerta del corazón?
"El amigo, dice, es, ante todo, uno que no juzga. El amigo es quien abre la puerta al viajero con todas sus limitaciones, sus muletas, su bastón y no le pide que dance para juzgar su danza. Y si el viajero habla de la primavera que ya ha llegado, el amigo es aquel que acoge dentro de sí la primavera. Y si habla del horror de la carestía en el pueblo de donde viene, el amigo sufre con él el hambre. Porque la amistad en el hombre es la parte destinada a ti y abre para ti una puerta que, tal vez, no abrirá nunca a ningún otro. Son verdaderos amigos míos los que se postran conmigo en la oración, unidos como granos de una misma espiga en espera de convertirse en pan".
La segunda es de otro grande, Henri Nouwen y dice así: "El amigo que puede permanecer en silencio con nosotros, en un momento que nos sentimos desesperados o confundidos; el que puede quedarse a nuestro lado en una hora de dolor o de duelo; el que acepta la idea de no saber, no curar, no sanar y nos hace ver la realidad de nuestra impotencia, ése es el amigo que nos aprecia". Y podemos añadir: que nos tiene confianza, a pesar de todo.
La tercera es de Pablo VI, el papa de la amistad, que supo ser "amigo" de mucha gente con un toque de unicidad y que aún hoy nos sorprende: "la amistad se funda en afinidades espirituales espontáneas, que producen placer y fervor, encienden la fantasía y facilitan las iniciativas que uno sólo no se atrevería a emprender". Podemos peguntarnos: ¿Por qué?, precisamente porque el amigo con su confianza refuerza nuestra confianza en nosotros mismos y, gracias a ella, nos abandonamos a la onda creativa.
"¡Dar la vida por los amigos!"
No puedo terminar esta nota sin referirme a la Biblia que tanto ha hablado de la amistad, de sus dotes, de sus ventajas…
En el libro del Sirácide leemos: "Un amigo fiel es una protección segura; el que lo encuentra ha encontrado un tesoro. Un amigo fiel no tiene precio, su valor no se mide con dinero. Un amigo fiel protege como un talismán; el que honra a Dios lo encontrará.
El amigo es igual a uno mismo, y su acciones son iguales a su forma".
En las postrimerías de su vida, Jesús quiso rubricar todas esas enseñanzas, con este diamante: "No hay amor más grande que dar la vida por los amigos, y ustedes son mis amigos, si cumplen lo que les mando".

UN PEDAZO DE CIELO
(Padre Zezinho)
Si muero antes que tú, hazme un favor:
Llora cuanto quieras, pero no te enojes
con Dios por haberme llevado.
Si no quieres llorar, no llores.
Si no logras llorar no te preocupes.
Si quieres reír, ríe.
Si algunos amigos te cuentan algo de mí,
óyelos y cree lo que digan.
Si me elogian demasiado, corrige la exageración.
Si me critican demasiado, defiéndeme.
Si quieren hacerme un santo,
sólo porque he muerto,
di que yo tenía algo de santo,
pero estaba lejos de ser el santo que pintan.
Si quieren hacerme un demonio,
muestra que yo tal vez tuve algo de demonio,
pero toda la vida procuré ser bueno y buen amigo.
Si intentan canonizarme di que yo nunca quise ser incensado en vida.
Si hablan más de mí que de Cristo, llámales la atención.
Si sientes tristeza y deseas rezar por mí,
puedes hacerlo, pues quizás necesite tu ORACION.
Si quieres hablar conmigo, habla con Jesús y yo lo escucharé.
Espero estar con Él lo suficiente
para continuar siendo útil para ti donde esté.
Y si quieres escribir algo sobre mí,
di solo una frase:
¡Fue amigo, creyó en mí y me quiso para Dios!
¡Era una flecha que vivía apuntando en dirección a Dios!
Ahí, entonces, derrama una lágrima.
Yo no estaré presente para enjugarla,
pero no hace falta, pues otros amigos lo harán en mi lugar.
Y viéndome bien sustituido,
iré a atender a mi nueva tarea en el cielo.
Pero de vez en cuando, da una escapadita hacia Dios;
no me verás, pero yo estaré muy feliz viéndote a ti mirar hacia Él.
Y cuando llegue para ti la hora de ir a ver al Padre,
ahí donde nadie puede separarnos,
viviremos la amistad que aquí nos preparó para El.
¿Crees en estas cosas?
Entonces, reza para que los dos vivamos
como quien sabe que va a morir un día
y que muramos como quien supo vivir bien.
La amistad sólo tiene sentido
si hace el cielo más cercano
y si aquí inaugura su comienzo
Pero, si yo muero antes que tú,
creo que no voy a extrañar el cielo...
Ser tu Amigo,
Ya era Un Pedazo de Cielo